San Bartolomé de Oreña

 

Cercano a la costa en la zona occidental de Cantabria podemos encontrar la pequeña ermita de San Bartolomé de Oreña, del siglo IX. Tenemos constancia de esta localidad ya desde principios del Siglo XI. De este modo aparece documentado en el Cartulario del Archivo Diocesano de Santillana en sendos documentos de 1031 y 1034 al respecto del Monasterio de "San Quince de Oreña". Ya en el siglo XII, encontramos varios documentos en el Cartulario de la Abadía de Santa Juliana, al respecto de varias donaciones de Doña Urraca al Señorío de Oreña. En el Becerro de Behetrías de 1352 aparece como behetría de los hijos y nietos de Díaz Gutiérrez de Oreña.

Es curioso que a pesar de la abundancia de reflejos documentales al respecto de la localidad, como ya hemos visto, poco o nada hallamos en las fuentes al respecto de su Iglesia, con advocación a San Bartolomé, aunque hasta el Siglo XVI fue a Santa Coloma. De este modo poco sabemos de su origen. Se trata de una Iglesia sencilla, de estructura simple de piedra sin labrar, lo que le dota del encanto típico del románico más rural.

Consta de una nave rectangular de mampostería con sillares en los esquinales. El ábside, mas pequeño y bajo que la nave, es oblicuo, ya que su pretendida redondez es bastante imperfecta. Destacan sus canecillos, de labra tosca, que adornan las cornisas tanto de la nave como del ábside.

En el interesante Blog Raices y Recuerdos de Oreña, encontramos dos interesantes artículos que no quiero dejar de destacar (dejo enlace a ambos para poder leerlos en su versión original). El primero de ellos hace referencia a un artículo de Ángel Hernández Morales, arquitecto provincial, publicado en la revista Altamira en 1953, en la que se nos detalla la situación de la Iglesia anterior a su restauración. Leer artículo 1.

En el segundo artículo, interesantísimo, se hace referencia a la inauguración en 1972 de la restauración de la Iglesia el día de la fiesta de San Bartolomé, y se relata el proceso de financiación de la obra, que ascendió a 278.000 pesetas de la época. Leer artículo 2.

Más Información:

• Miguel Ángel García Guinea, Románico en Cantabria, Ediciones de Librería Estudio, 1996. 
• Vicente Herbosa, El románico en Cantabria, Ediciones Lancia, 2002, pág. 40

Fotografías y Textos ©Óscar M. Ruiz